Vamos al estadio

Para qué voy a ir a ver esos "duros"...

Es muy peligroso ir...

¿Qué lugar se te vino a la mente luego de leer las frases anteriores? Probablemente tu respuesta haya sido el estadio... que triste ¿No? Pero bueno, la verdad es que en nuestra Honduras,más de alguna vez hemos escuchado a alguien decir estas cosas o peor aún hasta las hemos dicho nosotros.Hoy quiero compartir con ustedes mi punto de vista sobre este tema pero sobretodo contarles que siente Andrea cada que va al estadio.

Estadio Nacional 

Crecí en una ciudad pequeña y sin equipo en Liga Nacional así que mentiría si dijera que voy al estadio desde chiquita. Sin embargo desde muy pequeña veo partidos de Liga Nacional, de la Selección y con los años también de varias ligas del mundo. Siempre miraba la gente en el estadio y me daban ganas de estar ahí, de ser yo la que estuviera gritando,celebrando y cantando un gol y cuando enfocaban a la gente triste me preguntaba qué se sentirá ver a tu equipo perder. 

Hoy me hace muy feliz contarles que Andrea ya sabe qué se siente vivir todas esas emociones que solo experimentas estando en el estadio. Seré sincera no voy desde hace 10 años, para nada, de hecho han pasado unos 4 o 5 años desde la primera vez que fui; (digamos que todo es mucho más fácil desde que me mudé a la capital) pero vaya que he acumulado varias historias y muchos recuerdos en ese tiempo.Es mas me atrevo a decir que hoy por hoy ir al estadio es de mis actividades favoritas. Solo para que se hagan una idea yo soy de las que ha llorado de emoción,felicidad o tristeza viendo un partido (en otro momento les contaré de eso más a detalle), así que para mi y estoy segura que para muchos ir al estadio no es cualquier cosa.

En varias ocasiones me he preguntado ¿Por qué la gente no va tanto al estadio? Después de analizar las opiniones de varias personas o hasta lo que yo he dicho para no ir descubrí varios motivos en común.
Es muy peligroso.- No es para nadie desconocida la situación de violencia e inseguridad en nuestro país y lastimosamente hasta los eventos deportivos se ven afectados porque las personas no sienten la confianza de ir a los estadios o bien temen de los disturbios que a veces se dan entre barras.Gracias a Dios nunca me ha pasado nada pero siempre es importante tomar precauciones. Ir siempre acompañado, no buscar pleitos con los aficionados del equipo contrario y no portar cosas de valor. Ah y tené presente que vas al estadio, así que lleva ropa cómoda. 
No hay dinero.- Muchas veces el factor económico resulta un obstáculo y es muy común ver a los aficionados pidiendo a los clubes a través de las redes sociales que bajen los precios. Va a depender de la localidad a la que queras ir pero me ha pasado que no tengo para la entrada (tengan en cuenta que no gano un sueldo así que Andrea no puede irse a silla todos los fines), así que toca priorizar y guardar las fichitas para pagar la entrada.
No hay nivel.- De todas creo que este es el motivo que más me entristece, que la gente piense que los partidos de nuestra Liga no tengan el nivel suficiente como para ir a verlos. Hablando de esta temporada en particular estoy contenta de ver que hay varios equipos que andan con buen fútbol. Además se supone que si vas a apoyar a tu equipo vas a estar ahí en las buenas y en las malas.

Un Domingo en el Nacional 

Ahora quiero que conozcan cuáles son las razones por las que amo tanto de ir a ver los partidos desde las gradas.
Es la excusa perfecta para compartir con la gente que queres.- Siempre voy acompañada y pues el chiste es ir y pasar un rato ameno haciendo algo que les gusta. 
Es disfrutar de toda la aventura.- Ir al estadio es más que solo sentarte en la gradería o silla y ver durante 90 minutos un partido. Es todo el proceso: desde caminar cuadras para poder llegar, es hacer fila para comprar entradas o bien regatear con los vendedores para que te las den más baratas, es ajustar para comprar las famosas carnitas, es hacerte "alero" de la persona que está cerca y hablar del partido y así... 
Es tener la oportunidad de alentar a tu equipo de cerca.- Esta es una de mis partes favoritas, ver a las barras apoyando a los equipos. Es tan bonito estar ahí y sentir la energía que transmite la barra con sus cánticos y como contagian a todo el estadio al punto de ser una sola voz. Además se siente tan bien tener la libertad de poder gritar, brincar, levantar tus manos y hacer lo que queras porque podes,porque todos ahí entienden tu sentimiento y porque nadie te va a juzgar. Es increíble ver como compartís con otras personas que tal vez ni conoces el amor por un mismo equipo. 
Es olvidarte de todo y todos.- En mi caso ir al estadio es un escape a la rutina de la semana, es una diversión sana que te ayuda a desconectarte del mundo y conectarte con tu equipo, con el partido y con el momento. 

Aficionados en la pantalla del Nacional

Una postal de la zona Sur del Nacional

En fin, nada me gustaría más que ver que cada temporada que pasa nuestros estadios se llenen más, porque cada vez que El Nacional o cualquiera de los estadios de Honduras se llena se me pone la "piel chinita" así se los digo. En esa parte también estoy pendiente yo y mi compromiso es ese ir cada vez más y de aquí a veinte años tener una gran colección de codos jaja (los codos son las entradas). No sé si a vos te encante el fútbol tanto como a mi, tampoco sé si vas o has ido algún estadio... espero que sí; si no las hecho te invito a que lo hagas aunque sea por puro turismo y cultura general. Aún hay muchísimos estadios alrededor del mundo que muero por conocer y muchos partidos por ver así que esta vida por los estadios apenas comienza.

Gracias por leer, 

Andrea Fuentes

Nuestra Honduras

La selección...

Siempre que habló o pienso en la selección siento una mezcla de sentimientos por dentro. Creo que los partidos en los que más he sufrido, han sido los de Honduras, pero también las veces que más he disfrutado han sido gracias a ellos. Nuestra selección, aunque bueno para comodidad de muchos solo es nuestra cuando gana, ayer sufrió una dura derrota ante Brasil. Después de esto, las redes sociales estaban inundadas de comentarios al respecto, algunos defendiendo a los jugadores y otros atacándolos. 

celebrando el pase a semis.

Si, fue muy triste ver el partido, de inicio a fin… Esta vez también me tocó verlo en la universidad y confieso que falte a mi clase de las 8:30 a.m. por quedarme guardando lugar para cuando iniciara el partido. Lastimosamente la felicidad ayer solo nos duró 19 cortos segundos. El primero de los seis goles brasileños cayó justo en ese momento con Neymar y se convirtió en el gol más rápido en la historia de los Juegos Olímpicos. Aún en el medio tiempo yo creía que las cosas podían ser distintas en el segundo. Ya en el segundo tiempo, Pinto hizo algunos cambios, pero ya la cuesta estaba muy arriba y era difícil que ellos influyeran en el resultado. 

Buba en el suelo luego de gol brasileño.

Podría ponerme a hablar de todo lo malo que hubo en el partido; los errores en defensa, la falta de reacción, caer en el juego y provocaciones de Neymar… pero en cambio he decidido no ser una más insultando a los jugadores. Lo único que si voy a criticar fue lo que pasó al final del partido. ¿Cómo es posible que te acaban de “meter” seis goles y salgas corriendo atrás de Neymar para pedirle: foto, autógrafos y camisa? Creo que fue un completo error hacer eso sobre todo por parte de los miembros del cuerpo técnico. Neymar, yo sé que es una estrella del Barcelona, que muchos lo admiran y que no lo vas a encontrar caminado por el parque a diario. Sin embargo, Andrea (o sea yo jajaja) pienso que por sobre todo debe estar la dignidad y el profesionalismo. Algo que siempre he pensado es que nos hace falta trabajar la parte psicológica de TODOS los que integran la selección y así poder borrar complejos e inseguridades que aunque digan: "Eso qué tiene que ver? Tiene todo que ver.

Palacios y Neymar

Ayer una amiga me dijo: “Andy te veo triste, ¿Qué te pasa?" En el momento no sabía qué me pasaba pero ahora que lo pienso mucho tuvo que ver esa derrota. No lo digo en sentido de reproche para nada pero estoy segura que no soy la única que quedó así. Muchas personas dicen que les exigimos más a los mismos jugadores que a las autoridades y no sé cuantas cosas más. Me puse a pensar en eso y llegue a una conclusión: la selección es nuestro escape, es el medio que usamos para evadir todo lo que a diario pasa en nuestra querida Honduras. Como país estamos urgidos de noticias positivas y  todos vimos en la selección esa oportunidad...TODOS incluyendo a los jugadores y cuerpo técnico queríamos esa final, queríamos ver el nombre de nuestro país en lo más alto y ganar por primera vez esa tan anhelada medalla.

Elis observa el gol de Neymar.

Afortunadamente la posibilidad sigue viva y aunque no será una medalla dorada o plateada, si puede ser una de BRONCE, un bronce que va valer oro. Honduras aún puede ver su bandera elevándose en la ceremonia de premiación y lograr lo que nunca se ha logrado en nuestro país. Todavía estás a tiempo, a tiempo de volver a creer, de volver a soñar que ganar la medalla SI es posible. Nuestra selección tiene con que ganar esa medalla, lo de Brasil fue un mal partido, aquí lo que queda es dejar atrás eso y tratar de volver a hacer todo lo bueno que se había hecho en los partidos anteriores, concentrarse y divertirse. El próximo sábado todos pendientes de la H.

Un poco de humor (tomada de Pictoline)

Gracias por leer, recorda compartir y comentar.

Andrea Fuentes.

El sueño sigue

Solo es un partido. ¿Cuántas veces hemos escuchado esta frase? Seguramente todos la hemos escuchado antes pero saben qué, no, no es solo un partido y menos si se trata de la selección. Ayer Honduras logró un histórico pase a semifinales de los Juegos Olímpicos después de ganarle a Corea del Sur con un gol de Alberth Elis. En semis toca enfrentarse a Brasil, el próximo miércoles, para conseguir el pase a la final. 

Los jugadores antes de iniciar el partido.

En lo futbolístico puedo decir que fue un partido duro, de mucho contacto y cortado por las faltas. En la defensa ayer Honduras tuvo (a mi parecer) su mejor partido, estuvieron más ordenados y bueno ni hablar del fenomenal partido de Buba. No les voy a mentir hubo un momento en el partido, sobre todo en el primer tiempo, en el que Corea fue más y de no haber sido por "Buba" López quién sabe qué hubiera pasado. El guardameta del Real España ayer tuvo, me atrevería a decir, el mejor partido de su vida hasta el momento. Fue impresionante ver las atajadas que hizo, si atajadas, porque fueron más de cinco. Otro que también lo hizo muy bien fue el capitán Bryan Acosta, quizá más discreto que Elis, Buba y Quioto pero igual de importante con los pases que hacía. Los que se robaron atención evidentemente fueron Elis por el gol y Quito por la asistencia y constantes desbordes en la banda todo el segundo tiempo.

Los jugadores celebrando el gol.

Hablando de ellos, el gol cayó al minuto 60, después de la gran corrida de Quioto, Elis anotó. En ese momento estaba sentada, pero me levanté de un solo y comencé a gritar, aplaudir y saltar… ah y no me volví a sentar hasta que terminó el partido. Después se vinieron los 30 minutos más eternos del mundo y típico todos pedíamos al árbitro que terminara el partido. Todo fue tensión, comerse las uñas (que por cierto ni tengo), caminar de un lado para el otro en fin todo eran nervios en esa interminable espera. Al final afortunadamente todo era felicidad, emoción y orgullo porque el objetivo se había logrado, porque los muchachos habían dado un paso más, porque habían hecho  historia, porque en el mundo hablarían de Honduras por algo bueno…. Porque ahora estamos más cerca de la medalla.

Elis, anotador del gol.

He visto los cuatro partidos de la selección en Río (contra: Argelia, Portugal, Argentina y Corea) algunos en la casa y otros en la cafetería de la universidad. Ayer me tocó verlo sola en la sala de la casa así que pude gritar como loca a gusto. Les cuento yo soy de las que sufre cuando veo los partidos de mis equipos sobre todo los de Honduras, bueno hasta he llorado pues… un día de estos les contaré esa historia jaja. En general creo que nadie sufre ni disfruta tanto como los aficionados de la selección hondureña pero es parte del vive y eso solo hace que las victorias como la de ayer sean más bonitas.

Tengo que admitir que sí, le pedí a Dios, no sé si haya sido correcto o no pero lo hice. Incluso me puse a pensar en que fijo no era la única pidiéndole a Dios que ayudara a su equipo en ese momento; tal vez los coreanos estaban haciendo lo mismo. Así que me pregunté: ¿A quién ayuda en esta situación, qué ondas? Al final del partido me encantó ver a los hondureños orando, ver sus publicaciones en las redes sociales y un rato después encontrarme con el vídeo de ellos cantando alabanzas en el bus. Y ni hablar de todos nosotros los hondureños que teníamos inundadas todas las redes desbordados de emoción. En ese momento pensé que si, Dios está con nosotros, siempre lo está. Los jugadores ganaron y están en semifinales como resultado de varios factores: estrategia táctica, individualidades, proceso de trabajo. En fin, son varias cosas, entre ellas esa "manito" y bendición de Dios que sabe que muchas veces es más que un partido de fútbol. A veces un triunfo de la selección significa una alegría y un escape para 8 millones de hondureños.

Los jugadores al final del partido.

El miércoles el sueño sigue contra los locales: Brasil. A mi mente solo viene ese partido también contra Brasil el 4 de Agosto en los Olímpicos de Londres 2012. Honduras-Brasil/2012 Ese partido tuvo de todo incluida la expulsión de dos de nuestros jugadores (uno de ellos salió ovacionado por todo el estadio) y al final Brasil lo ganó 3 a 2. El miércoles representa una nueva oportunidad porque el fútbol si da revanchas y porque Honduras merece y sueña con la alegría de una medalla…. Porque la H23 va por una medalla.

Gracias por leer, recorda compartir y comentar.
Andrea Fuentes

El 33 de Olimpia

Uno de los recuerdos de infancia, que creo que la mayoría compartimos, es como salíamos a jugar pelota en la calle. La historia que les traigo hoy inició así. Al igual que muchos niños alrededor del país y del mundo entero este joven se enamoró del fútbol, cuando era apenas un niño, jugando pelota en las calles de su barrio. Hoy, varios años después de aquellas tardes en las "potras de barrio", juega de manera profesional en la primera división de Honduras en el equipo al que ha seguido desde niño: Olimpia. Andrea pero ¿De quién estás hablando? El joven del que les hablo es: Michaell Chirinos, que a sus 21 años, ya es figura en el cuadro merengue. He visto jugar a Chirinos varias veces, algunas desde las gradas del estadio y otras desde el televisor; sin embargo no había tenido la oportunidad de tener contacto con él. Gracias a una amiga pude contactarme con él, le conté que quería hacerle una pequeña entrevista  y amablemente accedió.

Chirinos posando con la Copa 30 de Olimpia.

Chirinos entró al Olimpia desde pequeño, pasando por todas las categorías inferiores, hasta llegar a primera división. El delantero comenzó a llamar la atención de todos mientras estaba en las reservas, gracias a sus goles y gran nivel en los torneos, y Héctor Vargas (director técnico del Olimpia) le dio una oportunidad en el primer equipo. Han pasado casi dos años desde su debut en primera división con Olimpia (8 de Septiembre de 2014 en un partido contra Platense) y Chirinos ya ha ganado dos títulos con el equipo (Copa Presidente y Liga). Precisamente cuando le pregunté, por el mejor recuerdo que el fútbol le ha dejado hasta el momento, el mencionó el título de Liga Nacional: "Para mí fue quedar campeón el torneo pasado porque fue mi primera final estando junto con el equipo y lo más importante jugando minutos en una final". En el presente torneo Chirinos ya anotó un doblete en la primera jornada y dijo estar agradecido con Dios por los goles y por ayudar al equipo. A su vez demostró su compromiso: "De mi van a tener lo mejor en cada partido, voy a luchar por cada balón".

Una de las cosas que hace a Chirinos diferente al resto de jugadores es su particular historia con Olimpia, no solo estuvo en todos las categorías inferiores del club, además fue parte de la famosa "Ultra Fiel" (la barra del Olimpia). Así que decidí preguntarle: ¿Qué significa Olimpia para vos? Su respuesta solo demostró lo mucho que quiere al club: "Una institución en la que siempre quise  estar desde pequeño y que defenderé a muerte dando lo mejor de mí para ganar muchas cosas". Chirinos también me habló del "lado difícil" de ser futbolista: "Creo que para mí lo más difícil son las lesiones y estar a veces mucho tiempo fuera de la familia pero esto es así y uno se va acostumbrando". Quizá muchos ya sepamos de este muchacho por que los hemos visto jugando, pero más allá de su vida en la cancha, Chirinos se cataloga a sí mismo como alguien sencillo que disfruta estar con su familia y amigos.

Partido Olimpia vs. Real Sociedad en Tegucigalpa

Chirinos es un joven jugador lleno de metas y sueños: "Quiero Salir al extranjero y ser un referente para el país y para mi selección".  A Michaell siempre le gustó el fútbol y el mismo se sorprende de lo que está viviendo: "Nunca imaginé llegar donde estoy ahorita y primero Dios pueda llegar aún más lejos". Finalmente le pedí que le diera un mensaje a todos esos  niños en nuestro país que sueñan con ser futbolistas: "No se desesperen que siempre sigan luchando por su sueños de ser futbolistas, las oportunidades llegan y siempre hay que estar bien preparado para recibirlas y demostrar".

Seguramente vamos a seguir escuchando del jugador promesa de Olimpia que ya es una realidad, y viéndole actuar como revulsivo cada vez que entra a la cancha, así que vayan apuntando su nombre y  número de camisa (33), 

Una vez más gracias por leer (queda pendiente la foto con Chirinos jaja), recorda compartir y comentar.

Andrea Fuentes

Andrea, ¿Qué te pasó en la nariz?

Ya perdí la cuenta de cuántas veces he contado "la historia de mi nariz", pero hoy es un buen día para volver a hacerlo. Todo pasó hace más de quince años, era domingo y encima día de la madre, mis abuelos, nos llevaron a mis primos y a mí a casa de una de sus amigas a jugar con sus nietos. El patio de Doña Iris (la amiga de mis abuelos) estaba lleno de maceteros de cemento y todos los niños estábamos jugando "potra" o sea estábamos jugando pelota niñas contra niños. Por querer ser la niña fuerte corrí para atrapar la pelota, cuando corría me empujaron y tropecé en uno de los maceteros  rajándome y sangrando a chorros por la nariz. Actualmente tengo en mi nariz una cicatriz en forma de V. A pesar de las muchas cremas que he usado para disminuirla la marca sigue ahí, no me mal interpreten: mi cicatriz, no me molesta es más ya es parte de mi cara y de mi vida.

Mi cicatriz me acompaña desde 1999.

 A estas alturas tal vez se estén preguntando: ¿Por qué Andrea nos está contando esto? Pues aquí la razón: Antes de empezar a escribir este post me pregunté: ¿Cuándo nació mi amor por el fútbol? Para mi sorpresa todo empezó antes de lo que pensaba y ese día que mi nariz quedó marcada de por vida, jugando fútbol, era el comienzo de mi amor por este deporte. Así que hoy por hoy básicamente soy una joven que no se aburre de leer, ver, oír y hablar de fútbol todo el día.

Hace unos quince años si sintonizabas un canal deportivo únicamente ibas a ver periodistas, comentaristas y analistas hombres. Si hacemos ese mismo ejercicio en este momento nos vamos a dar cuenta de que en todos los grandes canales deportivos locales e internacionales ya hay presencia de mujeres. Todavía en Honduras son más los hombres que juegan, hablan, “saben” y aman el fútbol así que aunque suene exagerado y parezca algo que pasaba antes, sigue siendo raro y no del todo aceptado que una mujer ame el fútbol (aunque cada vez somos más mujeres disfrutando del deporte más bonito del mundo).

Con el pasar del tiempo he ido acumulando anécdotas que tienen que ver con esto… En Enero de 2014 gracias a un anuncio, me di cuenta del primer Congreso Deportivo, inmediatamente le dije a mi mamá y le pedí que por favor me comprara una entrada y así fue. El evento duró dos días y obviamente la mayoría de los asistentes eran hombres.
Conocí a Carolina Padrón, Carmen Boquín, Eduardo Biscayart y Hristo Stoichkov por mencionar algunos. El segundo día hicieron trivias premiadas para los participantes, jamás voy a olvidar esta pregunta: "¿Qué equipo de la Liga Española dirigió Hristo?" Yo sabía la respuesta era el Celta de Vigo, así que envié la respuesta al Twitter lo más rápido que pude. Lo más bonito pasó un minuto después, por el micrófono dijeron: "ya hay ganador bueno ganadora porque es mujer." Subí al escenario y el mismo Hristo (ex jugador del Barcelona y ganador de Balón de Oro) me entregó un balón autografiado por él y  Eduardo Biscayart (periodista deportivo). En ese momento sentí que había ganado un Balón de Oro (sí, como los de Messi o CR7), no podía dejar de sonreír y ese día casi ni dormí. Siendo muy sincera jamás he usado el balón, está ahí guardado como un tesoro jaja, y por momentos como ese y otros que compartiré más adelante, es que me enamoro cada vez más de este maravilloso deporte llamado fútbol.

Les presento mi balón de oro.

Gracias por leer, recorda compartir y comentar.

Andrea Fuentes.